Madres solteras, maternidad digna
Foto: Sra. Ambrosio Zárate, por Gabriela Martínez/MujeresNet
Por Gabriela Martínez Martínez
En una sociedad lamentablemente machista y misógina no se puede tolerar el brillo y la fuerza de una mujer cuya pareja ya no está por la situación que sea. Actos violentos de todo tipo y críticas crueles contra ella, acoso por parte del “ex”, feminicidios, desapariciones, solo por el hecho de haber decidido seguir adelante sola con sus hijos e hijas.
En algún momento de nuestra vida llegamos a conocer alguna madre soltera, tal vez la amiga de una amiga, a una conocida del trabajo, sea como sea, seguramente has visto lo duro que es la vida de esa persona y lo difícil que es criar un hijo o hija sola.
Aun así también existen muchas madres solteras que no quieren ni necesitan el apoyo de alguien para poder criar a sus hijos e hijas y otras más que lo último que buscan es algún romance. Mujeres valientes que se quedaron a cargo de sus hijos e hijas.
Sin embargo, en la sociedad –debido la mayor parte a los medios y al conservadurismo social y familiar– las madres solteras suelen ser señaladas como las “pobrecitas” mujeres que “deberían tener un hombre”; son las “dejadas a su suerte”, las “abandonadas”, las que “no debieron haberse separado” de la pareja, aunque éste fuera un hombre que evadía sus responsabilidades, o un violento o de esos que van por los cigarros y ya no regresan. Incluso el tan viralizado “mamá luchona”. Comentarios que en lugar de sumar, restan; que solo dañan la integridad de las mujeres.
En una sociedad lamentablemente machista y misógina no se puede tolerar el brillo y la fuerza de una mujer cuya pareja ya no está por la situación que sea. Actos violentos de todo tipo y críticas crueles contra ella, acoso por parte del “ex”, feminicidios, desapariciones, solo por el hecho de haber decidido seguir adelante sola con sus hijos e hijas.
Este artículo está dedicado a aquellas mujeres que han pasado o están pasando por este proceso de ser madre soltera, y que tal vez se sientan identificadas con las siguientes historias.
Ambrosio Zárate
Soy de la población de mujeres que vivió maltratos, insultos… algo que no quisiera recordar porque sigue doliendo. Murió mi marido hace 29 años, quedé con 8 hijos y embarazada, al mes y medio de fallecido llegó mi último hijo. Tuve que trabajar en el campo en la siembra de maíz, cuando se podía iba a escarbar milpas, hago pan y es como he podido salir adelante.
Carecí de varias cosas pero principalmente de comida, pues prefería darle a mis hijos aunque sea una tortilla con sal. Mi vida ha sido dura pero nada me detuvo, pasaron 5 años de la muerte de mi esposo y uno de mis hijos tuvo un accidente, estuvo en el hospital por un mes en coma. Saliendo del hospital lo trajimos a casa, sabíamos que él había perdido movimiento de todo su cuerpo, y entre mis demás hijos y yo lo acostamos en una cobija y lo llevábamos afuera para que tomara el sol, no nos dábamos por vencidos, buscaba formas para poder sacar adelante a mi hijo, que volviera a su vida de antes.
Bien lo han dicho, una madre hace hasta lo imposible para sacar a sus hijos adelante. Busqué la manera para atender a mi hijo en un hospital particular en la Ciudad de México, estaba muy fracturado y necesitaba hacerse varios estudios para que empezara su tratamiento, gracias a todos nuestros conocidos e incluso gente que había en el hospital que se me acercaba y me daban 100 pesos incluso hasta 20 pesos, todo era bien recibido.
Viví con mi marido por 13 años, tomaba, nos golpeaba, nos corría de la casa. Para que mis hijos no sufrieran de algún golpe o regaño sin razón, los sacaba de la casa y los llevaba a los árboles y cuando mi esposo se dormía como eso de las 3 o 4 de la mañana iba por mis hijos para que regresaran a casa a dormir, y si él no se dormía buscábamos un lugar seguro para quedarnos o incluso nos dormíamos en uno de los árboles hasta que se le pasara la borrachera.
Por cosas del destino él se fue a trabajar a Acapulco, Guerrero, y lo mataron, no se sabe la causa, probablemente por borracho o por haber empezado algún conflicto, incluso por un asalto, no lo sé. Sus compañeros de trabajo ayudaron a trasladarlo con nosotros, recuerdo que fueron 800 pesos, me endrogué con todo lo que se gastó por el funeral y terminé de pagar en un año.
Seguí trabajando, pues para mí la vida no se terminó, tenía 9 hijos que mantener, logré mandarlos a la primaria, secundaria y preparatoria, hasta ahí pude darles estudios. Gracias a Dios mis hijos me apoyaron, unos dejaron la escuela para ir a vender lo que tuviéramos: podría ser pan, habas, trigo, chícharos, chiles manzanos, frijol etc., otros me ayudaron a cosechar, lavar ropa, hacer la comida, tengo una hija que pudo terminar su licenciatura.
Gracias a Dios todavía sigo de pie. Estoy enferma del riñón, estoy luchando, aún siembro, ya no tengo tantos animales pues ya no puedo trabajar mucho, pero sigo adelante.
María Elena es hija de Ambrosio Zárate (de 67 años de edad), ambas de Toluca, Estado de México. Ella nos platica que está orgullosa de su madre, pues dice que no cualquiera sobrevive todo lo que ella pasó. En entrevista con MujeresNet.info narra la historia de su mamá, nos comenta que se juntó a los 16 años, pero antes de eso se veía a escondidas con su amado, ya que si la madre de Ambrosio se enteraba de que andaba de novia, su castigo era recibir varazos por todo el cuerpo e insultos.
Pero como en la mayoría de los casos, “la historia de amor perfecto de pronto se volvió una pesadilla”, nos dice María Elena, pues antes de embarazarse su mamá ya observaba cambios en su esposo, ya existían gritos, e incluso golpes. Ambrosio intentó regresar varias veces a casa con su madre, pero ella no lo aceptó, le decía la típica frase: “Tú te buscaste eso, ahora te aguantas”.
María Elena recuerda que en su niñez su mamá siempre lloraba y veía golpes en su cuerpo, pero aun así seguía trabajando. Dice que su mamá siempre tenía la comida ya preparada antes de que llegara su papá, porque si eso no pasaba el castigo a su mamá eran los golpes.
Ella lamenta mucho la pérdida de su padre, porque para ella siempre fue el ejemplo a seguir pues dice que fue un hombre muy trabajador, pero también se siente bien que su mamá ya no haya sufrido más golpes, pues esos golpes podrían haber pasado a más. Lamenta todo lo que tuvo que vivir su madre para poder sacar adelante a 9 hijos, quienes hoy en día cada uno ya hizo su vida, hasta nietos le han dado. Hoy buscan sanar su corazón dándole amor y cosas de las que alguna vez careció.
Lizeth
Lizeth tiene 21 años de edad nacida en la Ciudad de México. Narra que era la típica chica popular de la escuela, todo el mundo quería hablar con ella, le gustaba ser solidaria, respetuosa y a todos les contestaba. En la preparatoria todo eso cambió, llegó un chico a su vida, se hicieron novios, todo era color de rosa: su familia ya lo conocía, llegaba a reuniones familiares, salían con amigos. Él le prometió un futuro donde estarían juntos, pero no fue así. Al enterarse que sería padre, el chico mostró estar ilusionado, estuvo en los primeros meses de embarazo, pero de la nada se alejó y no supo más de él.
Dice que durante el embarazo cayó en la depresión, pues su familia le empezó a hacer comentarios como: “Te lo dijimos”, “¿dónde está?”, “solo te utilizó”. Liz no sabía cómo manejar la situación, no sabía cómo iba a mantener a su bebita, pues para ese entonces aún tenía 17 años, no trabajaba.
La vida perfecta que tenía ya no era la misma, los celulares cambiaron por ropa para la bebé, el dinero que le daban para ella ahora era para la fórmula de su bebé, sus amistades se alejaron, ya nadie le hablaba, las fiestas se volvieron desvelos y tuvo que asistir a terapia psicológica para poder enfrentar su nueva realidad de vida.
Liz agradece a su mamá que no le dio la espalda y que siempre la apoyó; le agradece por tener ese carácter y no dejarla darse por vencida, pues dice que intentó quitarse la vida cuando pensó que era su única salida.
En la actualidad trabaja limpiando casas y deja a su niña con su abuela y abuelo, ella está muy triste por no poderle dedicar tiempo a su hija, pero sabe que necesita el trabajo para sacarla adelante.
Jefas de hogar y de su vida
A todas aquellas madres solteras que deciden ser mejor para sus hijos e hijas pero en especial para ellas mismas, quiero decirles que no son las únicas mujeres que están pasando por este proceso, ¡no están solas! De acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) la labor de las madres solteras resalta como jefas de familia y como principales proveedoras de ingresos a sus familias. La Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE) de 2022 registró que en México vivían 65 millones de mujeres de 12 años en adelante, de las cuales 67% eran madres, y de ellas 11% eran solteras, sobre todo las que tenían entre 30 y 34 años de edad, siguiendo las de 25 a 29, 35 a 39 y 40 a 44 años. Asimismo, 7 de cada 10 madres solteras eran económicamente activas y de acuerdo con laEncuesta Nacional de Ingresos y Gastos de los Hogares (ENIGH) 2020, en los hogares 65% de los ingresos provenían del salario por el trabajo de la madre soltera.
Actualmente México está avanzando en apoyos sociales a madres solteras y leyes que buscan que los padres se responsabilicen de sus hijos e hijas, por lo menos de la pensión alimenticia. Ya no es “normal” el abandono paterno. Ahora quien deba pensión tendrá restricciones para la obtención de licencias y permisos para conducir; obtención de pasaporte o documento de identidad y viaje, y para participar como candidato a cargos de elección popular.
La crianza es responsabilidad de ambos progenitores, por lo que es importante comenzar a cimentar conciencia en los padres para que se involucren y cumplan con sus obligaciones, así como eliminar la carga de cuidados y de crianza en las madres.
Claro que también se vale no querer ni un quinto del “ex” con tal de no verlo y continúe robándote la energía. También se vale darle vuelta a la página y seguir adelante, sin pasados que estorben ni dañen. Ser madre soltera no es un estigma, es maternidad digna.
Fuentes:
https://aristeguinoticias.com/0905/mexico/inegi-destaca-la-labor-de-las-madres-solteras/ consultado el 15 de mayo de 2023
https://www.dof.gob.mx/nota_detalle.php?codigo=5687925&fecha=08/05/2023#gsc.tab=0 consultado el 15 de mayo de 2023
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